Texla Energías Renovables cierra 2025 reforzando su papel como socio técnico de referencia en el sector energético español, respaldada por un crecimiento sostenido y por la confianza de los principales promotores y grupos energéticos del país. A lo largo del ejercicio, la compañía ha intervenido en una cartera activa superior a 7.600 MW, prestando servicios especializados de ingeniería de la propiedad, dirección ambiental, puesta en servicio, almacenamiento energético y gestión de activos en proyectos en distintas fases de desarrollo, construcción y operación.
Un año de expansión y madurez
Durante 2025, Texla ha reforzado su presencia en todo el territorio nacional, con una especial concentración en Andalucía, donde se localiza más del 40% de la potencia en la que participa. A lo largo del año, la compañía ha seguido impulsando proyectos de hibridación solar-eólica y de almacenamiento energético, dos ámbitos estratégicos que permiten optimizar la capacidad de evacuación existente y favorecer una integración más eficiente y estable de las energías renovables en la red.
Texla está involucrada en el desarrollo de más de 1.000 MW en sistemas BESS, distribuidos en Castilla-La Mancha, Aragón y Andalucía, reforzando su papel como socio técnico en soluciones que aportan mayor capacidad de gestión, flexibilidad operativa y optimización al sistema energético nacional.
El conjunto de proyectos en los que Texla ha intervenido a lo largo del ejercicio —abarcando diversas tecnologías y distintas fases de desarrollo y ejecución— pone de manifiesto la solidez técnica, el rigor operativo y el compromiso ambiental de la compañía. En este ámbito, Texla ha desempeñado funciones decisivas en ingeniería de detalle, permitting, dirección facultativa, gestión ambiental y gestión de activos, contribuyendo de forma directa a que numerosas instalaciones renovables avancen con garantías técnicas, regulatorias y ambientales.
Compromiso con la sostenibilidad y el entorno
En 2025, Texla ha consolidado también de manera significativa su compromiso con la sostenibilidad, avanzando en la definición de un marco corporativo más estructurado en materia ambiental, social y de gobernanza. Tras su adhesión al Pacto Mundial de las Naciones Unidas el pasado mes de octubre, la compañía ha comenzado a sentar las bases para la integración progresiva de criterios ESG en su política general, dando los primeros pasos para alinear su actividad con estándares internacionales de sostenibilidad y buen gobierno.
A lo largo del año, Texla ha operado bajo los más altos estándares de sostenibilidad, centrando sus esfuerzos en la identificación y mitigación de riesgos ambientales, la ejecución de actuaciones pioneras de restauración ecológica en áreas sensibles y la implantación de medidas compensatorias innovadoras. En la actualidad, la compañía asume la dirección ambiental de 171 proyectos en fases de desarrollo, construcción y operación, consolidando su papel como un actor técnico responsable en la transición energética y en la protección del entorno.
Entre las acciones destacadas figuran nuevas medidas de conservación de la biodiversidad, planes de restauración del entorno y actuaciones de protección de especies protegidas en colaboración con entidades especializadas. Algunas de estas iniciativas han generado resultados medibles en la conservación de especies como el águila imperial o la alondra ricotí, así como mejoras significativas en los ecosistemas locales, consolidando un modelo de transición energética que también regenera y protege el territorio.
Este compromiso reafirma la visión de Texla de promover un desarrollo energético que combine progreso, eficiencia y respeto por el entorno.
Mirando a 2026
Con la experiencia acumulada de más de 26 GW en los que ha participado a lo largo de su trayectoria, Texla Energías Renovables enfrenta 2026 con una hoja de ruta orientada a responder a los nuevos retos del sistema energético. La compañía potenciará de forma decidida su actividad en proyectos de almacenamiento energético, reforzando su papel como socio técnico en el diseño, la coordinación y la puesta en marcha de soluciones BESS, y avanzará en la evolución de su servicio de gestión de activos hacia un modelo integral de asset management que permita supervisar, planificar y optimizar la operación global de las plantas renovables.
