Como ya sabemos, las energías renovables son el futuro para España y para el planeta. Y no lo decimos nosotros, los datos lo reflejan. Según Red Eléctrica de España, a finales de 2021, la electricidad limpia representaba ya el 56,6% de la capacidad nacional.
Por ello es crucial conocer cómo funcionan estas tecnologías y, en este caso, nos vamos a centrar en los 4 tipos de energía renovable Texla: ¿cuáles trabajamos y por qué? ¡Vamos a ello!
Energía renovable Texla: energía eólica
¿Has ido alguna vez a Tarifa? ¿Has sentido en tu piel la fuerza del viento que hace? Además, seguro que si has pasado por allí habrás podido ver los enormes molinos que decoran todo el litoral gaditano. Estos molinos son los encargados de generar una de las energías limpias más utilizadas de España.
La energía eólica tiene un funcionamiento muy simple y es que a través de un aerogenerador se transforma la energía cinética del viento en energía eléctrica. En este proceso de extracción trabaja un rotor que es el encargado de transmutar la energía cinética en energía mecánica que luego pasa a un generador y acaba por convertirla en energía eléctrica.
El óptimo aprovechamiento de los molinos depende, por supuesto, de la fuerza del viento. Por eso los parques eólicos se sitúan en lugares estratégicos y lo hacen en grandes grupos de aerogeneradores para obtener grandes cantidades de electricidad.
Energía fotovoltaica
La energía fotovoltaica es una forma de energía renovable que se produce a partir de la luz solar. Pero, ¿cómo se transforma la luz del sol en energía eléctrica?
En este proceso se utilizan paneles solares fotovoltaicos en lugares con alta exposición a la luz solar. Los paneles solares fotovoltaicos están formados por células fotovoltaicas que convierten la luz solar en electricidad mediante el efecto fotovoltaico.
Es decir, cuando la luz solar incide sobre una célula fotovoltaica, los fotones de luz se absorben por los materiales semiconductores que forman la célula. Esto provoca la liberación de electrones en el material semiconductor, que se mueven hacia la superficie de la célula y crean una diferencia de potencial eléctrico. Esta diferencia de potencial eléctrico es lo que se utiliza para producir electricidad.
Los paneles solares fotovoltaicos están conectados en serie y en paralelo para formar módulos o sistemas solares fotovoltaicos. Los módulos fotovoltaicos se instalan en techos o terrenos y están orientados hacia el sur o montados sobre seguidores para obtener la mayor cantidad de luz solar posible. Los sistemas solares fotovoltaicos también incluyen baterías para almacenar la energía producida y un inversor para convertir la energía eléctrica producida por los módulos fotovoltaicos en energía eléctrica de corriente alterna para su uso en el hogar o en la industria.
Energía termoeléctrica
La energía termoeléctrica es una forma de energía que se produce a partir de la conversión de la energía térmica del sol en electricidad. Se utiliza principalmente en centrales grandes eléctricas.
El funcionamiento de una central termoeléctrica es el siguiente:
- Se concentra el calor a través de espejos planos (heliostatos) en un receptor en una torre o a través de cilindros parabólicos en un tubo de vidrio.
- En el primer caso, el calor calienta y licua una sal, en el segundo un aceite térmico.
- Ese calor calienta y vaporiza un fluido, generalmente agua.
- El vapor se expande en una turbina, la hace rotar y con ello también un generador eléctrico conectado. El generador, con el “efecto dinamo” produce electricidad.
- La electricidad se transmite a través de líneas de alta tensión hacia la industria, los hogares y negocios.
En el fondo, el funcionamiento de la energía termoeléctrica es similar al de un motor de combustión, con la diferencia que en ese la expansión se consigue por la quema de un combustible fósil.
Energía biomasa
La energía biomasa es una forma de energía renovable que se produce a partir de la conversión de materiales orgánicos en electricidad o calor. Los materiales orgánicos más comunes utilizados para producir energía biomasa son la madera, los residuos agrícolas y forestales, los desechos de alimentos y la biomasa de algas y microorganismos.
El funcionamiento de una central de energía biomasa es el siguiente:
- Se recolectan y se procesan los materiales orgánicos para producir un biocombustible, como pellets de madera o etanol.
- El biocombustible se quema en una caldera para producir calor.
- El calor se utiliza para calentar un fluido, como el agua o el vapor, que a su vez produce energía térmica.
- La energía térmica se utiliza para generar electricidad a través de una turbina y un generador eléctrico.
- La electricidad se envía a través de líneas de transmisión a los hogares y negocios que la necesitan.
Ahora que ya conoces mejor la energía renovable Texla, seguro que tendrás miles de preguntas más sobre cómo comenzar a utilizar este tipo de energía y cuáles son los principales beneficios que te pueden aportar. Si es así, contacta con nosotros ahora para descubrir mucho más sobre el futuro de la energía.