Texla ha sido la responsable de liderar e impulsar todos los pasos y los procedimientos necesarios para la presentación y obtención de la puesta en servicio de dos plantas solares ubicadas en el término de Alcalá de los Gazules, en la provincia de Cádiz, así como las infraestructuras eléctricas de conexión.

Los parques fotovoltaicos, propiedad de BNZ, Alya (50 MW)  y Alamak (24 MW) cuentan con una potencia total de 74 megavatios y han involucrado para su construcción entre 560 y 580 puestos de trabajo directos e indirectos, contando con la colaboración de un total de 17 empresas locales.

Texla no es la primera vez que trabaja con BNZ productor de energía independiente que desarrolla, construye y opera proyectos de energía solar fotovoltaica en el sur de Europa: Portugal, Italia y España. Texla será la responsable de la puesta en servicio de tres plantas fotovoltaicas y sus infraestructuras de evacuación situadas en Moratalla, (Murcia), Jaén y Mérida (Badajoz) que alcanzan una potencia de 80 MW.

La puesta en servicio es una de las fases más críticas de un proyecto de energía renovable. Es el proceso orientado a la conexión física a la red, su energización, pruebas e inicio de su operación comercial. Dicho de otra forma son las acciones necesarias para que la instalación esté completamente operativa y pueda comenzar a generar electricidad y entregarla a la red eléctrica. Involucra una serie de pasos técnicos, administrativos y legales como estudios de viabilidad, obtención de permisos y licencias necesarios. También incluye pruebas de componentes y sistemas, verificación del rendimiento, conexión a la red y pruebas de seguridad, asegurando que todo funcione correctamente antes de la operación regular.

Una vez en funcionamiento, es necesario inscribir las plantas en el Registro Administrativo de Instalaciones de Producción de Energía Eléctrica (RAIPE). Este paso administrativo, gestionado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, asegura que la planta cumple con todos los requisitos técnicos, legales y ambientales. La inscripción permite, por tanto, operar legalmente y acceder al mercado eléctrico español.

La colaboración entre BNZ y Texla ha sido fundamental para conectar los proyectos en los plazos establecidos con los más altos estándares técnicos y legales, con el objetivo de seguir avanzando en la transición energética en Europa.